Transformar el miedo
El miedo te quita todo tu poder, toda tu fuerza.
El miedo es una emoción y como otras emociones es útil para adaptarnos
al momento presente. Cuando nos avisa de un peligro es necesario y nos lleva a
la acción. Pero si nos sentimos paralizados, bloqueados de forma continua, ese
miedo nos quita fuerza para protegernos o defendernos y no nos adapta al
momento presente.
El miedo es energía bruta no transformada en acción
Hoy estamos conviviendo con ese miedo constantemente. Es un
miedo que activa los mecanismos de supervivencia de lucha o huida del cerebro
límbico, de nuestro cerebro de lagartija como lo llama Fidel Delgado. Un miedo
que activa recuerdos del pasado, nuestros de nuestra infancia o de nuestros
ancestros, o de traumas familiares que se transmitieron de generación en
generación. Miedo a la enfermedad, a morir, a morir solo, a perder el trabajo,
a no tener suficiente, miedo a morir de hambre…Cada uno de estos miedos nos habla de nosotros mismos, de algo que todavía tenemos pendiente, sin asumir.
Podemos por eso distinguir el miedo real necesario para
actuar ahora, del miedo imaginario (que para tu inconsciente es igual de real).
Esos miedos están ahora continuamente activados si atiendes a
las noticias de cualquier medio de comunicación que bajo la excusa de “mantenerte
informado” están constantemente bombardeando nuestra psique con noticias de escenarios
dramáticos y cifras cambiantes con dudosa intención. Vivimos en alerta constante ( y en estado de alerta) Muchos han dado en
llamarlo el márketing del miedo cuya especialidad es crear y difundir por los
principales medios a los que estamos conectados, escenarios trágicos aparentemente
reales que al ser aceptados por la mayoría se convierten en reales en la mente
colectiva.
Algo está pasando, de eso no hay duda
y ese algo necesita de un cambio de conciencia colectiva que nos permita salir
del miedo y recuperar nuestra fuerza y nuestro poder de actuar y crear. Ese algo que está ocurriendo ha necesitado que el mundo se parara para poder actuar. Para tomar conciencia. Para darnos cuenta. Para volver a conectarnos con nosotros mismos. Y todo esto puedes elegir vivirlo desde el miedo o desde la confianza de que este cambio era profundamente necesario. Nada volverá a ser como antes porque vivir como antes era precisamente el problema. Estamos creando un mundo nuevo y el antiguo está lentamente desapareciendo ante nuestros ojos.
Ante cualquier situación que se nos presente en la vida
somos libres de elegir como vivirla. Somos libres de elegir vivir desde el miedo o desde la confianza.
La decisión es individual. Tú decides.
Si decides vivir esta situación desde la confianza, el
siguiente paso es desactivar estos miedos imaginarios que te acercan a vivir
aquello que precisamente menos deseas. ¿Cómo?
Puedes hacerlo solo o con ayuda. Hay varias formas. Puedo ayudarte.
¿Cual es tu miedo?
losconsejosdeteresa@gmail.com
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